Las plantas termosolares son una ruina, así que ahora tienen dos trabajos: generar energía de día y cazar asteroides de noche
En su momento parecían el futuro de la energía solar por su capacidad para seguir el Sol con espejos oscilantes. Hoy las plantas solares de concentración, las que dirigen la luz mediante helióstatos hacia una gran torre central, no pueden competir con el desplome de precios de la fotovoltaica. Pero cuando una puerta se cierra, a veces se abre una ventana al universo.
En corto. Un proyecto piloto en Estados Unidos ha empezado a aprovechar estos gigantescos campos de espejos cuando cae el Sol …